Parecía mentira cuando comenzó la
temporada después de lo bien que nos vendió la moto ese grupo llamado Sporto
Gol Man 2020. Esperpento tras esperpento, el engendro de inversor valenciano que
se hizo cargo de las riendas del F.C. Cartagena a final de la pasada campaña ha
estado a punto de dar al traste con las ilusiones y las ganas de fútbol de toda
una ciudad. Gracias a Dios, llegó a tiempo alguien serio, que vino con el
dinero por delante y, sobre todo, con la verdad por bandera.
Paco Belmonte y el grupo al que
representa han hecho en poco menos de un mes muchísimo más de lo que sus
predecesores hicieron en todo un año. Y es que desde la llegada de Javier
Martínez y Javier Marco no dejaron de sucederse acontecimientos bochornosos.
Desde la contratación de un entrenador que no pudo entrenar, hasta los impagos
a jugadores y empleados, pasando por la desbandada de jugadores y demás sucesos
que han hecho que esta temporada vaya a ser recordada para siempre por lo mal
planteada que estuvo desde su inicio.
Pero no todo iba a ser malo. Y si
hay que sacar algo positivo de esta temporada que ya llegó a su fin, me quedaría
con la unión que se ha forjado entre el equipo y la afición. Una afición que a
final de temporada, cuando el equipo más lo necesitaba, se ha volcado con su
club, con sus jugadores, con sus colores, con su escudo y ha avivado , y de qué
manera, ese vínculo de manera muy positiva de cara al alentador futuro que se atisba.
Soy de los que piensa que¸ si
desde el comienzo de liga hubiera existido una buena planificación deportiva, con
esta misma plantilla el equipo podría haber quedado en la zona alta de la
tabla. Con una plantilla amplia, una gestión normal y una temporada plácida en
lo institucional, este Cartagena nos podría haber dado una alegría todavía
mayor. Por desgracia nunca lo podremos comprobar. Con esto quiero decir que hay
muchos jugadores de la actual plantilla con los que yo me quedaría para abordar
el proyecto de la próxima campaña.
Son ya muchas las temporadas en
las que el Cartagena realiza muchísimos fichajes y no hay una base de plantilla
a la hora de comenzar un proyecto. Jugadores como Limones, Ceballos, Tarantino,
Sergio, Arcas, Luque, Carlos Martínez, Gato o Hevia bien podrían sentar una
base sobre la cual construir el Cartagena de la próxima campaña. Habría que
hacer 10 u 11 fichajes. La ventaja sería que los que se queden ya son una
familia, una familia unida tras la temporada de penurias y adversidades que han
vivido, una familia que seguro está deseosa de demostrar lo que realmente son
capaces de hacer.
Yo apuesto por la continuidad y
por reforzar esta base con jugadores de calidad, jugadores fuertes de la
categoría que le den al equipo el empaque y la amplitud de plantilla de la que
este año se ha carecido.
Sinceramente, creo que Palomeque
ha hecho un buen trabajo al frente del equipo pero le falta nivel para llevar
al equipo hasta cotas más altas. Tal vez un puesto en el organigrama técnico
del club le sirva para seguir desarrollándose como entrenador y en un futuro
pueda ser ese entrenador de nivel que todos deseamos.
Sea como fuere dejaremos trabajar
a su antojo a un Paco Belmonte que se ha ganado todo el crédito del mundo y
seguro que forja un proyecto basado en la sensatez y en el buen hacer.
Seguro, segurísimo, que se
encontrará muchas trabas a la hora de hacerse con las riendas del club, seguro
que aparecen acreedores de debajo de las piedras. Seguro que los Javieres
aparecerán pidiendo el oro y el moro.
Paco lo hará bien, esperaremos
acontecimientos. Lo haremos ilusionados porque en Cartagena, como no podía ser
de otra manera, habrá fútbol la próxima temporada. Porque en Cartagena, por fin
se va a disfrutar.
Gracias Sr. Belmonte por su llegada, gracias por no perder nunca la esperanza, gracias por hacernos soñar.
¡Siempre Efesé!