05 mayo 2010

Siete batallas por un sueño.



Siete son las batallas que le restan al FC Cartagena por librar hasta que finalice la dura disputa por una de las tres plazas que otorgan el privilegio del ascenso a la máxima categoría del fútbol nacional.

No será nada fácil lograr el objetivo, un objetivo que nadie se marcaba al inicio de la temporada, pero que ha ido ganando en consistencia conforme iban consumiéndose jornadas, hasta el punto de que el equipo dirigido por Juan Ignacio Martínez es, de los veintidós conjuntos que conforman el campeonato, el que, hasta el día de la fecha, ha estado más semanas ocupando plaza de ascenso.

Por eso me emociona comprobar desde la distancia como se está viviendo en la ciudad esta situación, como se toman excepcionales iniciativas desde el club, y como, por fin, se percibe una participación activa tanto de aficionados como de pequeños comerciantes que se vuelcan con el equipo de su ciudad.

Personalmente me pone la piel de gallina el mero hecho de pensar en lo que puede suceder en un futuro ya no tan lejano. Siempre he pecado de cauteloso, tal vez más de la cuenta, y ahora lo quiero ser más que nunca. Sin dejar de lado la emotividad y entusiasmo con la que han de afrontarse estos siete encuentros restantes, pienso que el ascenso sería un premio excepcional y un soberbio colofón a una temporada de ensueño, difícilmente repetible en años venideros; pero con la cautela y el respeto hacia los rivales que harán todavía más grande a este club con ganas de seguir creciendo y mejorando poco a poco.

Por todo lo anterior creo que el premio ya lo tenemos, que el regalo ya nos lo hicieron hace tiempo y no es conveniente someter a más presión de la necesaria a una plantilla que ha dado el 200% durante toda la temporada, y que a buen seguro lo seguirá haciendo.

Quedan siete batallas que los guerreros de la plantilla librarán dándolo todo, sin dejar ni una gota de sudor en sus cuerpos, ni un ápice de su aliento. Siete batallas de las cuales cuatro se dilucidarán en el escenario cartagenerista y las otras tres serán como foráneos.

Ante Numancia, Levante, Hércules y Albacete en casa, el Cartagonova debe ser una olla a presión, una fiesta del fútbol que de alas a nuestro equipo e imponga respeto al rival. No seré yo el que diga que en casa el equipo tiene que hacerse fuerte, ganarlo todo.

Salamanca, Córdoba y Recreativo de Huelva son los rivales a los que los blanquinegros han de rendir visita; no anda mal el Cartagena como equipo visitante, a pesar de ello, casi todos los rivales se están jugando algo y por estas fechas los maletines comienzan a hacer acto de presencia, por lo que habrá que sufrir mucho, muchísimo, hasta el final.

Para empezar, este domingo se prevé que se volverá a llenar el Cartagonova, así ha de ser hasta el final; por otra parte me gustaría comprobar como se viste la ciudad de blanquinegro, coches, balcones, fachadas… De verdad que me emociono sólo de pensarlo, gracias a todos por este año inolvidable. ¡Vamos Cartagena, vamos campeón!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

DEJA TU COMENTARIO EN ESTA ENTRADA ¡ES GRATIS!